Huevos onsen

4 Huevos

3 Cuchara sopera Vinagre

1 Ajos chalote

picado

3 Granos de pimienta

1 Huevo

1 Yema

125 g Manteca

un poco Sal

1 Pizca Pimienta de cayena

un poco Zumo de limón

1 Ajo chalote

picado

Mantequilla para cocinar al vapor

200 g Espinacas en hojas

un poco Sal

un poco Pimienta

un poco Nuez moscada

4 rebanadas Trenza de pan

un poco Flor de sal

un poco Pimienta

un poco Rábano picante

Empiece cociendo los huevos en una bandeja de acero inoxidable perforada a 64 °C durante 1 hora.

Lleve el vinagre, las chalotas y los granos de pimienta a ebullición en una cacerola pequeña y redúzcalos a la mitad a fuego lento. Vierta el líquido por un colador fino en un bol, apretando un poco las chalotas con una cuchara.

Añada el huevo y la yema, batiendo bien. Derrita la mantequilla en una cacerola pequeña y llévela a ebullición. Vierta la mantequilla líquida en la salsa, removiendo constantemente.

Sazone al gusto con sal, pimienta de cayena y zumo de limón.

Vierta la espuma holandesa en un dispensador de crema batida. Llene el dispensador de crema batida con un cartucho. Agite bien y mantenga la salsa caliente.

Saltee las chalotas en mantequilla en una sartén grande a fuego medio hasta que estén translúcidas. Añada las espinacas y saltéelas hasta que se deshagan. Sazone con el resto de los ingredientes.

Tueste las rodajas de trenza. Extienda las espinacas por encima.

Rompa los huevos con cuidado sobre un pequeño colador y deje que el líquido se escurra. Coloque los huevos sobre las espinacas.

Espolvoree con flor de sal y pimienta. Ralle un poco de rábano picante por encima. Vierta la espuma de holandesa por encima.

Cocción al vapor 64 °C durante 1 H