Los tonos puros de HENRYTIMI

HENRYTIMI es una empresa italiana que lleva el nombre de su creador, Henry Timi: un célebre artista y artesano, además de defensor de los «interiores artísticos». Cuando está en Milán, Henry Timi diseña interiores radicales, pero es en su tierra natal, la campiña de Le Marche, donde transforma los materiales naturales en elementos de decoración funcionales tan únicos como auténticas obras de arte.

Henry Timi es un artista y artesano radicado en Milán (Italia). Nació y se crio en la campiña de Le Marche, donde desarrolló una profunda sensibilidad por la belleza y los incomparables detalles de los materiales naturales. Inauguró su galería homónima, HENRYTIMI, en el 2009; hoy día, es una de las instituciones más exclusivas e inspiradoras del diseño milanés. Las galerías HENRYTIMI han llegado a las ciudades de Roma, Sídney y Melbourne, y se prevé que sigan expandiéndose en los años venideros.

Me ha costado prepararme para esta entrevista; en las redes sociales eres muy evasivo, y en el sitio web de HENRYTIMI parece haber más poesía que información. 

Sí, siempre he estado un poco desligado del sistema. No formo parte de él o, mejor dicho, ahora formo parte de él, porque el sistema se inspira en mí. Ello conlleva una gran responsabilidad y supone un desafío diario, pero también me colma de alegría. HENRYTIMI cuenta con muchos seguidores y recibe numerosas visitas, por lo que tratamos de mantener un cierto grado de coherencia, una perspectiva sólida. Pero sí, estamos ―y estoy― fuera del sistema, así que hay muy poca información sobre mí, pero eso está bien. Además, soy muy celoso de mi intimidad. En cuanto al sitio web, fue una decisión meditada: narramos nuestros proyectos en blanco y negro, por poner un ejemplo. Intentamos ser lo que somos y, por el momento, hemos optado por un enfoque más silencioso. 

¿Cómo nació HENRYTIMI?  

De una necesidad. Sentí la necesidad de hacer algo diferente e inventé ese algo. Todo empezó hace unos diez años. Vivía la vida a un ritmo frenético, el que marcaban tanto el mundo del diseño como el de la moda, la arquitectura, la comida y la música, que son mundos que siempre me han apasionado, que siempre he seguido. Sentí la necesidad de crear lo que consideraba que faltaba en el mercado para aquellos que tenían una sensibilidad parecida a la mía. Empecé con piezas a las que denomino «colección primitiva»: son piezas fundamentales, mínimas. Comencé a exhibirlas y atrajeron las miradas curiosas de personas de todo el mundo. Esas personas me insuflaron fuerza para creer en todo; para construir una realidad que, desde su susurrado y humilde origen, ha amasado reconocimiento, importancia y respeto. No nos solapamos con ninguna otra marca; seguimos nuestro propio camino y siempre trataremos de ceñirnos a esta visión. 

¿Cómo describirías a HENRYTIMI en la actualidad?  

HENRYTIMI es una empresa que siempre ha intentado contar la historia de materiales naturales como la piedra y la madera. Es una marca que, gracias a sus técnicas avanzadas, a su excepcional fabricación artística con tecnología punta y a las personas que creen en el diseño, transforma incluso los materiales más intrincados, exclusivos y complejos en extraordinarias obras funcionales. HENRYTIMI es un ejemplo revolucionario del concepto de artista-fabricante, ya que, además del pensamiento, representamos el diseño y la fabricación. Asimismo, al elaborarlo todo en nuestras instalaciones, personificamos la calidad, la exclusividad, el lujo y la artesanía auténtica… Se trata de una combinación de todos estos factores.

Colección de Elisa Ossino y HENRYTIMI

Colaboraste con Elisa Ossino en la instalación «Time and Matter» en Brera y en la creación del nuevo V-ZUG Studio. ¿Cómo interpretaste su concepto?

No lo interpreté, sino que aporté el valor de mi investigación y mi maestría. Elisa y yo nos conocemos desde hace muchos años. Es una persona muy sensible y la diseñadora internacional que más se acerca a mi trayectoria artística. La instalación de Brera está compuesta por labores de travertino natural con peculiaridades propias de HENRYTIMI, obras de conocimiento y análisis en profundidad que, al mismo tiempo, reflejan una belleza simple y, por ende, absoluta. En cuanto al V-ZUG Studio, me complace enormemente que compartiéramos este proyecto, que nació como una senda de investigación constante y extrema en la que combinamos nuestras ideas y las transformamos en obras de arte funcionales. Los artefactos del V-ZUG Studio —un lavamanos, una cocina, un contenedor y un taburete— son el apogeo de un periplo que lleva años materializándose con V-ZUG, el resultado incipiente del arte aplicado a la funcionalidad.

¿En qué consiste la colección cápsula creada con Elisa Ossino?

Es un encuentro, una visión y una fuerza que une a dos almas sensibles. La colección está compuesta por un taburete, una mesa y una cocina, numerados y fabricados en Italia. La llamamos Passione, que significa «pasión». Refleja la pasión como sentimiento, guía y deseo de ser fiel a uno mismo y estar abierto a cosas nuevas, pero manteniendo una conexión con el pasado, la tradición eterna de la materia y la naturaleza, que son y siempre serán el baluarte de cada elección.

¿Por qué elegiste V-ZUG como colaboradora?

V-ZUG es una marca que nos refleja en materia de estilo porque se concentra en la simplicidad, la esencialidad y la autenticidad. Nos consideramos como «los otros», el otro lado del mercado, más extremo y menos comercial, por lo que nos gusta la idea de incluir elementos tecnológicamente avanzados, pero con una pizca de poesía. Hemos llamado «tecnología avanzada» a la colaboración entre HENRYTIMI y V-ZUG porque no nos gusta el término «electrodoméstico». V-ZUG es más que este concepto, es algo que va más allá y que intenta diversificarse y diferenciarse del sistema. Su deseo de comercializarse con una imagen de exclusividad en una posición de mercado muy elevada me atrajo al instante. Además, tengo que decir que los detalles marcan la diferencia. Encontramos al aliado perfecto para nuestros proyectos en la elegancia de los electrodomésticos V-ZUG, cuya esencia estética es fruto innegable de sus excepcionales conocimientos y su eficacia tecnológica. Los electrodomésticos se engarzan como piedras preciosas en nuestros recipientes funcionales, que poseen una fuerza totémica, reflejando no solo la piedra, sino todo un universo de valores.

«Los electrodomésticos se engarzan como piedras preciosas en nuestros funcionales recipientes, que poseen una fuerza totémica». Henry Timi

¿Cómo empezaron a fabricarse tus diseños?  

Delegar el proceso de fabricación en terceros nunca me ha parecido el modo correcto de proceder en lo que respecta a los productos de lujo. Estos productos no son lujosos por ser caros; para nosotros, lujo es sinónimo de servicio. Este servicio se presta al cliente final, pero también engloba el ofrecido por los materiales que nos brinda la naturaleza, los cuales deben respetarse, recogerse, tocarse, elaborarse, transformarse y reinventarse. Si esto se hace a través de diferentes talleres, el alma perece. Es por ello que nos organizamos escrupulosamente, no solo a la hora de exponer nuestros productos y contar su historia en nuestras galerías de Milán y Roma, sino también al momento de fabricarlos. Tanto es así que nuestra producción aúna la carpintería artística, la marquetería y la carpintería, y se desarrolla en salas de acabado donde lijamos, pintamos, tinturamos y pulimos los acabados con nuestras propias manos. Somos una empresa independiente: fabricamos el 90 % de los productos de forma interna y ofrecemos un servicio integral, porque quien compra HENRYTIMI hoy compra una marca de primerísima calidad, una de las más exclusivas, y por ende llevamos la coherencia por bandera. La fábrica se asienta en la región de Le Marche, en Corridonia: un lugar mágico, ideal para mi visión artística. No es un mero lugar de trabajo; yo lo llamo Manifattura [manufactura] deliberadamente, porque es un lugar donde las manos se aúnan con la mente, el alma y el sentido de la sensibilidad para producir belleza y bienestar. Curiosamente, también representa quién soy, quiénes somos, vistos desde fuera. Es un recipiente blanco rodeado de naturaleza y fauna: frente a la fábrica se yergue el establo donde habitan mis caballos. El interior es similar al de mis galerías.  

Tienes galerías en Milán, Roma y Australia. ¿En cuál de esos lugares te sientes más a gusto?  

La fábrica se emplaza en Corridonia porque soy oriundo de Le Marche. Me crie entre sus inmemoriales pueblos del interior, enclavados en las colinas de Leopardi, cuya memoria ha quedado retratada en la poesía pictórica de Rafael. Pero siempre soñé con la ciudad, así que me vine a Milán para trabajar y estudiar. Ahora reparto mi tiempo entre Milán, Roma, Corridonia y el mundo: trabajamos en todas las ciudades más destacadas y, en los próximos años, emprenderemos iniciativas muy importantes manteniendo el enfoque que adoptamos aquí en Italia; por ejemplo, desplegaremos las galerías en zonas prestigiosas situadas en lugares de renombre, con espacios que nos permitan expresar quiénes somos.